La endoscopia digestiva alta es un estudio que permite visualizar con detalle el esófago, estómago y duodeno (parte inicial del intestino delgado) para detectar enfermedades como gastritis, úlceras, reflujo, hernia hiatal, infecciones como Helicobacter pylori o incluso descartar tumores.

Se realiza con un equipo delgado llamado endoscopio que se introduce por la boca mientras el paciente está sedado y sin dolor. El procedimiento dura solo unos minutos y ofrece resultados precisos.

Porque muchos síntomas digestivos pueden parecer leves, pero esconder problemas más serios. Este estudio permite ver directamente la causa del malestar y evitar diagnósticos erróneos o tratamientos a ciegas.

Solicítala si presentas alguno de los siguientes síntomas:

• Reflujo que no mejora con tratamiento
• Dolor o ardor en el estómago
• Náuseas frecuentes o vómito
• Dificultad para tragar
• Sensación de llenura rápida
• Sangre en vómito o heces oscuras
• Anemia sin causa aparente
• Diagnóstico o sospecha de Helicobacter pylori
• Seguimiento de gastritis crónica o esófago de Barrett
• Evaluación prequirúrgica (como cirugía bariátrica)